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En la última entrada hablaba de la dificultad de encontrar matrículas ambigramáticas en España. Que me había pasado meses intentando encontrar una y... ayer otra. Con la particularidad de que justo ese día había estado hablando con Mayor acerca de que nuestro próximo coche me gustaría que fuera un vehículo eléctrico. Y, esa nueva matrícula que encontré, era, efectivamente, de un coche eléctríco, como se puede ver en la tercera foto.

Matrículas de coche ambigramáticas

Las matrículas de coche siempre me han fascinado y, desde hace unos meses, he iniciado una búsqueda compulsiva de matrículas que sean ambigramas de sí mismas.

En España, desde la implantación del nuevo sistema de matriculación de vehículos, formado por 4 dígitos y 3 letras, ya no se pueden ver matrículas con simetría central, es decir, matrículas que girándolas 180º, se convirtieran en sí mismas. Esto podía ocurrir con el sistema anterior de código provincial, cuatro letras, y letras (1 o 2) en varias provincias, por ejemplo en Oviedo, habrá existido la matrícula O-0000-O o en Santander la S-8888-S y en Zaragoza la Z-6969-Z.

Pero con el nuevo sistema ya no pueden existir ese tipo de matrículas con simetría central. Sin embargo pueden hacerlo matrículas con simetría con eje horizontal. Es decir, matrículas que reflejadas en un charco, reflejarían la misma matrícula. Hoy mismo me he cruzado con el vehículo de la izquierda, he tenido que ser rápido sacando el móvil y disparando la foto (de ahí el horroroso encuadre).

Si volteamos la foto para simular "el charco", comprobamos que la matrícula del coche queda (casi) exactamente igual y perfectamente legible, pero la matrícula de la furgoneta de la derecha no se entiende tan bien.

No es fácil encontrar este tipo de matrículas, ya que los únicos números que pueden contener son 0, 3 y 8, es decir solo 81 de cada 10.000, el uno podría servir si no llevara el palito de arriba que, por ejemplo, no existe en las matrículas británicas. Las letras válidas son B, C, D, H, K y X es decir solo 6 de las 20 letras que utilizamos en las matrículas, lo que hace que solo 216 de cada 8.000 matrículas tengan las 3 letras ambigramáticas, esto no es rigurosamente cierto, puesto que aún no tenemos todas las combinaciones de letras en la calle y, de momento, tenemos todos los vehículos que empiezan por B, C, D, H y muchos de la K. Dentro de algunos años, cuando los coches que empiecen por B, C o D empiecen a ir al desguace ocurrirá al revés y será aún más difícil de encontrar este tipo de matrículas curiosas.